¿Jugar? ¡Para el joven T-Rex, eso significa luchar con sus compañeros! ¿Quién será el más fuerte? Los investigadores han descubierto que estos reptiles prehistóricos han estado luchando ferozmente entre sí desde los 10 o 12 años. A esa edad, apenas tenían la mitad del tamaño de un T-Rex adulto. ¡Pero tenían una boca el doble de grande!